Homenaje a Lágrima Ríos en las Llamadas 2024
El desfile de Llamadas, uno de los eventos culturales más emblemáticos de nuestro país, se llevará a cabo este año los días viernes 9 y sábado 10 de febrero. La calle Isla de Flores, desde Zelmar Michelini hasta Minas, será el escenario donde la magia del candombe y la cultura afrouruguaya cobrarán vida.
Este año, los desfiles de las 45 comparsas tendrán un significado especial al llevar el nombre de Lágrima Ríos, figura icónica en la música y la representación afrouruguaya.
Lida Melba Benavídez Tabárez, conocida artísticamente como Lágrima Ríos, nació el 26 de setiembre de 1924 en Durazno, en una familia humilde. A lo largo de su vida, se convirtió en una de las figuras más influyentes en la música y la cultura de Uruguay. Es considerada tanto la "Señora del tango" como la "Dama del candombe".
Desde su infancia, Lágrima Ríos mostró un talento excepcional como cantante e intérprete de canciones populares. A la edad de dieciocho años, ya se destacaba en los "Recreos", espacios abiertos donde la gente se reunía en la década de 1940. Su voz, caracterizada por su calidez y su timbre templado y dúctil de contralto, le permitió abordar una amplia variedad de estilos musicales, incluyendo canciones folclóricas rioplatenses, guaranías, blues, negro spirituals, boleros, tangos, milongas y candombes.
A lo largo de su carrera, Lágrima Ríos cosechó numerosos triunfos y reconocimientos. Ganó un Concurso nacional como cantante de tangos en 1956 y actuó junto a la orquesta de Orosmán Fernández. Posteriormente, formó parte del grupo vocal "Brindis de Sala" durante diez años, grabando para los sellos Philips y Clave.
Además de su exitosa carrera musical, Lágrima Ríos dejó un legado como defensora y difusora de la cultura africana en Uruguay. Desde 1995 hasta su fallecimiento en 2006, ocupó el cargo de presidenta de Organizaciones Mundo Afro, donde promovió activamente la cultura afroruguaya y su comunidad.
Lágrima Ríos dejó una huella imborrable en la historia de Uruguay, y su legado perdurará en cada comparsa que desfile por la calle Isla de Flores, llevando su nombre y su espíritu en cada paso y cada tambor.